21 junio 2007

El Cabañal

Lo que está pasando en el Cabanyal no tiene nombre. Tras 16 años de apuesta personal de Rita Barberá por conseguir arrasar medio barrio, sólo podemos ver desidia, abandono, suciedad, destrucción... Esa es la gran mayoría de Rita, cómo no puede legalmente, que mejor que ir metiendo mierda poco a poco, para que la gente acabe queriendo que se haga el deseo de la alcaldesa.
Pero no, dentro de ese mapa de romanos invasores está la tribu gala de los miembros de la Plataforma Salvem el Cabanyal. Ese grupo de personas, desde una pequeña isla dentro de un mar inhóspito, ha conseguido paralizar en los juzgados toda la vorágine de Barbereitor.
No nos equivoquemos, la lucha todavía será larga, pero el tiempo y el dinero están a favor de los destructores. Todo el dinero del mundo, pero menos tiempo, también se les va acabando poco a poco.
Oigo en otros foros, que lo que les pasa a los cabañaleros se lo tienen merecido por votar al PP. Seamos realistas, Rita Barberá arrasa, arrasa en las urnas como arrasa el Cabanyal. Pero muchos vecinos-as no se merecen que les roben sus casas, su barrio, su vida. En una empresa ese acoso sería causa de cárcel. No así en la vida municipal, donde a la mayoría de los valencianos-as les importa un carajo que a unos pocos les roben sus vidas. Eso es de miserables, a los mayoría de los valencianos-as les gusta que le quiten su lengua, su cultura, su territorio, sus paisajes, sus playas, que se invierta más para el turismo que para la seguridad en los transportes, pero no por ello podemos decir que los valencianos se lo merecen por votar al PP.
Admitiré, aunque algunas cosas no me gusten, la voz de la mayoría. No admitiré, NUNCA, que en nombre de una mayoría se pretenda destruir la vida de nadie, y en el Cabanyal, la mayoría desea el mal a unos cuantos de sus vecinos. En ese caso, que la mayoría se vaya a la mierda.