05 mayo 2010

Peralta debe dimitir antes de afiliarse al Partido Popular

 Peralta es otro de los políticos que les encanta el poder, que les encanta estar en el gobierno, que les encanta tener a la policía a su cargo para reprimir a los que piensan diferente a él. 
Peralta no utiliza su puesto para acabar con la corrupción, ni para acabar con la prostitución, ni con la drogadicción, ni con las diferentes mafias que existen en Valencia. 
Peralta vive para el poder, para sentirse respetado, para codearse con la nobleza del siglo XXI, para asistir a la misa católica y confesar sus culpas y salir absuelto por la voz divina.
Peralta mandó a su policía a reprimir a personas indefensas sentadas en el suelo, Peralta sabía lo que hacía, Peralta escurrió el bulto, se escondió. Peralta ayudó a Rita Barberá en contra del Gobierno que él representa. Peralta golpeó a personas de todas las edades con total impunidad. Peralta mandó a gente al hospital. 
Peralta debe dimitir, o lo deben dimitir antes de que se afilie al Partido Popular, pues todos tenemos claro que acabará en ese partido, como tantos otros hicieron antes.
Y es que el poder, es el poder, hoy y hace cinco siglos. Que asco de país.