Al filo de un pensamiento anterior, he recordado las horas eternas pasadas en los servicios de urgencia de la sanidad pública. Una intolerable vergüenza, por la que deberían dimitir muchos políticos y responsables médicos.
Pero mira por donde, es algo que no preocupa a los ciudadanos. Nunca aparece como un problema en las encuestas que se realizan. Todo el mundo se acuerda del agua para todos, de la "defensa de la familia", de la Copa del América, visita del Papa.... pero nadie se une para pedir una sanidad pública digna y responsable.
Los ciudadanos tenemos derecho a ser tratados dignamente en los hospitales y centros de salud. Es intolerable que se gasten los impuestos en eventos lúdicos para ricos mientras los enfermos y sus familiares tienen que esperar muchas horas en que les atiendan en urgencias.
Desde aquí hago un llamamiento a todo el mundo que esté en contra de la atención en la sanidad.
POR UNA SANIDAD PÚBLICA, EFICIENTE Y DIGNA, SOLUCIONES YA.
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