Estoy harto de los espabilados

Pero más harto de los que permiten la existencia a los espabilados. Estoy harto de los que aparcan todos los días encima de las aceras y en calles peatonales (estoy harto de la policía local que lo permite), estoy harto de los compañeros de trabajo que desaparecen días enteros (estoy harto del jefe que lo permite).
Los espabilados, caraduras, desvergonzados, sinvergüenzas siempre han existido y siempre existirán, hay algunos-as a los que incluso envidio por su morro. Pero lo que pienso que es inaguantable e intolerable, es que la gente que puede tomar remedio contra esa gente pase de todo, no puedo entender como todos los días los mismos coches están sobre la acera, y no puedo entender como en el trabajo, los mismos empleados-as son los que es escaquean.