Os invito a todos a ver esta película egipcia que retrata los maltratos machistas en las diferentes capas sociales egipcias.
Creo que tiene un triple interés. Uno la eterna lucha en nuestro mundo occidental por acabar con esa lacra, vista desde el punto de vista de otra cultura. Por otro lado el integrismo religioso que sólo lleva a la negación del ser humano. Y por último el apoyo a un cine (los Babel) que proyecta películas que no podemos ver en otro sitio y que muchas veces nos enseñan mucho más que todas las comerciales juntas.
Mucho populista e inconsciente veo a mi alrededor que tilda de extremismos las políticas que son llevadas a cabo desde el Ministerio de Igualdad. Pero visto como está el panorama nacional, está claro que la política de dicho Ministerio se está quedando corta, y todavía hay que cambiar muchas mentalidades retrógradas.
Imaginaros eso en un mundo donde domina una religión alienante, integrista y machista.
Pero la película es un canto, dentro de su amargura, a la lucha y a la libertad de la mujer. Por cierto, me gustaría señalar de la película, es que quien la vea ya no volverá a decir nunca que no entiende de política. Porque la vida es política.
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